Efecto local de las Flores de Bach
Efecto local de las Flores de Bach
Todavía hoy es mucha la gente que desconoce el efecto local de las Flores de Bach en aplicaciones locales (o tópicas). Y esto abarca tanto a usuarios, terapeutas e incluso, aunque resulte un poco extraño, también a formadores. Sin embargo, las Flores de Bach han ayudado y ayudan físicamente a muchas personas.
Después de aplicarme en una quemadura la crema del Rescate1 y ver sus sorprendentes resultados, que ya venían avalados por varias décadas de utilización en situaciones de emergencia, mi primera pregunta fue la siguiente: Si las flores que contiene la fórmula, es decir Rescate (compuesta por 5 esencias del sistema) y Crab Apple, son tan eficaces en aplicación local, ¿las otras no sirven para nada? Evidentemente la respuesta es sí, sirven y mucho.
En el fondo, lo anterior no resulta tan extraño si pensamos en las Flores de Bach como un sistema holístico (holos del griego significa todo) que además del campo mental y emocional de la persona, toca también el físico y el espiritual… Y todo al mismo tiempo.
Desde la creación del sistema floral de Bach, el propio doctor utilizó flores de forma local. Un caso paradigmático se produjo en octubre-noviembre de 1932. Se trata de un seguimiento de 3 semanas en el que vemos dos aplicaciones locales no deducidas por la actitud de la persona, sino por otro tipo de lectura. Un electricista sufre severas quemaduras producto de una descarga eléctrica en una mano. Cito a continuación solo las partes donde aparecen las mencionadas aplicaciones2:
«24 de octubre. Cuatro días más tarde visité al paciente. La mano derecha estaba hinchada casi al triple del tamaño normal; presentaba quemaduras graves y profundas en la base del pulgar, entre el dedo anular y el meñique y también en la parte externa de la mano. La mano había perdido la sensibilidad y, en cierto sentido, estaba “muerta”; ausencia total de dolor. Se administró Clematis internamente para devolver la vida a la mano. Se añadió Impatiens a una loción para que actuara como un bálsamo en las heridas.»
«28 de octubre. La mano estaba mucho menos hinchada, pero le dolía un poco al vestirse; se produjo un ligero sangrado de las heridas de las quemaduras por primera vez. Se añadió Impatiens a la loción de Caléndula que se utilizaba para vendarle la mano; Impatiens y Agrimony se administraron internamente, B y Agrimony, como antes, para el estado mental.»
«11 de noviembre. Seguía bien, excepto por cierto agarrotamiento en los dedos, en concreto el pulgar, que estaba bastante rígido. Se administró Vervain de forma interna y también se añadió a la loción, para combatir el agarrotamiento.»
No se trata del único caso en donde aparecen aplicaciones florales, digamos que “heterodoxas”. Nora Weeks narra el siguiente caso de 19323:
«Poco tiempo después de encontrar el remedio Vervain, Bach fue llamado a lo de un paciente que había resbalado en el pavimento y se había torcido el tobillo. Cuando lo vio por primera vez, a las ocho de la noche, el tobillo estaba muy hinchado, tieso y dolorido. Se trataba de un hombre de recia contextura, de cincuenta años, sumamente impaciente. Pensaba que lo ocurrido lo incapacitaría durante tres semanas, lo que era grave desde un punto de vista profesional. Era de naturaleza entusiasta y esto lo llevaba a tensionarse y a tender a trabajar en exceso; su fuerte voluntad lo mantenía en pie cuando debía estar descansando.
La impaciencia indicaba el remedio Impatiens, y la tendencia a tensionarse y trabajar en exceso, junto con el intenso entusiasmo por su trabajo y cualquier cosa que hiciera, Vervain.
En un cuenco con agua caliente se le añadieron dos o tres gotas de cada uno de estos remedios, colocándosele en el tobillo una compresa con esto. Se le indicó que la volviera a humedecer en cuanto estuviera seca.
Al día siguiente pudo atender sus tareas profesionales, y a la tarde caminaba normalmente y se le vio golpeando su pie contra el suelo, diciendo: “Realmente, no pude haberme torcido este tobillo”.»
En el Manual Ilustrado de Chancellor4, encontramos más ejemplos:
«Hombre de mediana edad, mariscal del aire de la Royal Air Force. Había trabajado en exceso y se había esforzado demasiado durante varios años. Ahora, al despertarse por la mañana, sentía que no podría afrontar el día de trabajo, aunque de alguna manera lograba hacerlo. Sufría de varices y tenía dificultades para permanecer de pie. Operarse era urgente, pero él quiso intentar primero con los remedios de Bach. Se indicó Hornbeam para darle fuerza y vitalidad en su trabajo; también se le dio como loción para las piernas.»
Por supuesto que existen más casos de aplicaciones locales históricas y en varias de ellas se emplean flores no coincidentes con una prescripción “mental-emocional” de las esencias, sino por una lectura “diferente”.
A partir de 1994 empecé a difundir muchos de estos usos de aplicación local, sistematizando todo ello en una herramienta que llamé Patrón Transpersonal® que, a grandes rasgos, consiste en una clave de lectura de los signos y síntomas con los que se manifiesta una enfermedad o molestia, y su traducción a las Flores de Bach.
Con esta lectura podemos preparar fórmulas razonadas de aplicación tópica, muy útiles que complementan la prescripción oral con muy buenos resultados. Estos resultados se pueden observar tanto en cremas y otros vehículos (lociones, hidrolatos, colirios, etc.), incluso si estos contienen algún principio activo farmacológico o fitoterápico.
Es posible capacitarse en estos usos, tanto en mi Formación completa en Flores de Bach, como en la específica del Patrón Transpersonal®.
1 Cada elaborador floral llama a su crema de emergencia con un nombre diferente. Por ejemplo, la marca Bach: Rescue® Remedy; Healing Herbs, Five Flowers Remedy; Laboratorio Erboristico Di Leo, Estratto Universale, y un largo etcétera de fabricantes.
2 Párrafos extractados de Edward Bach. Obras Completas. Continente, 2017. También se pueden consultar en Flores de Bach. Patrón transpersonal y aplicaciones locales. R. Orozco, El Grano de Mostaza, 2017.
3 Los Descubrimientos del Dr. Edward Bach. Lidiun, 1993, del original en inglés de 1940. También en Orozco, 2017.
4 Lidiun, 1992, en español. Edición original en inglés, 1971.