Aplicaciones locales de las Flores de Bach: todo un mundo de posibilidades
Aplicaciones locales de las Flores de Bach: todo un mundo de posibilidades
Por Ricardo Orozco
Las Flores de Bach y la terapia asociada a ellas es una disciplina holística. Holos del griego, significa todo. Es decir, que el sistema floral de Bach enfoca al ser humano como una totalidad: mental, emocional, física y espiritual. Como una amalgama de planos interconectados entre sí e inseparables.
A pesar de la amplia difusión que la terapia floral del Dr. Bach tiene en este momento, todavía quedan áreas bastante infrautilizadas.
Es mucha la gente (usuarios y terapeutas) que encasilla las Flores de Bach en un compartimiento mental/emocional. Algo así como <<Las Flores de Bach sirven para ayudar en la gestión psicológica>>. Lo que sigue a esta afirmación es detallar otros sistemas que “trabajan” más lo físico o lo espiritual y, en este último punto, son “más evolucionados”.
Para muchos terapeutas, sobre todo para quien esto escribe, esta visión es demasiado reduccionista, además de errónea. El hecho de que conceptualmente se encasille algo no implica, ni mucho menos, que ese “algo” limite su efecto a lo que se espera de él.
Las Flores de Bach y la terapia asociada a ellas es una disciplina holística. Holos del griego, significa todo. Es decir, que el sistema floral de Bach enfoca al ser humano como una totalidad: mental, emocional, física y espiritual. Como una amalgama de planos interconectados entre sí e inseparables. Las Flores de Bach actúan simultáneamente sobre estos cuatro aspectos ya que todos nosotros somos un inmenso territorio compartido. Su acción a nivel mental y emocional es la más conocida, pero no la única.
La acción espiritual de las esencias no ofrece ninguna duda. Para Bach, la espiritualidad estriba en el aprendizaje de unas determinadas lecciones y en el desarrollo de otras tantas virtudes: compasión, amor, alegría, comprensión, tolerancia, firmeza, etc. Como vemos, se trata de lecciones intra o interpersonales que básicamente implican respectivamente temas de autoconciencia o capacidad de empatía, de inteligencia emocional en suma. La espiritualidad se extiende para Bach sobre temas de este mundo, de la vida cotidiana, del aquí y ahora, vinculados más con lo que uno hace y con una actitud ética ante la vida, que con lo que uno piensa o se figura. Desde luego resulta un insulto a la inteligencia el creerse más espiritual que otro por el mero hecho de no fumar, meditar o leer un determinado tipo de publicaciones.
La acción física de las Flores de Bach es evidente y puede evidenciarse de dos maneras: desde la toma oral, esto es desde un efecto general y simultáneo con los otros planos, como se detallaba unas líneas más arriba, o bien desde su aplicación local.
Los usos tópicos son de una efectividad sorprendente. A los más habituados a ellos casi nos resulta extraño que muchos terapeutas florales no los incluyan en sus tratamientos o no los conozcan.
De hecho, muchas personas intelectualmente inquietas que han empleado localmente el Rescue Remedy, por ejemplo en un golpe o una quemadura, se han preguntado lo siguiente: <<Yendo tan bien las flores en estos casos…¿Las otras no tienen nada que aportar?>> La respuesta es ¡por supuesto que sí!
En 1994 comencé, a raíz del estudio de unos casos primitivos del Dr. Bach, a investigar algunas aplicaciones locales. Esto me llevó, el año siguiente, a publicar mis conclusiones en un boletín de SEDIBAC (Sociedad para el Estudio y Difusión de la Terapia Floral del Dr. Bach de Cataluña). Más adelante, en 1996, estos trabajos se vieron reflejados en un libro: Flores de Bach: Manual para Terapeutas Avanzados. (Índigo, Barcelona). En 2003 publiqué por la misma editorial: Flores de Bach: Manual de Aplicaciones Locales, donde se recopilan 7 años de experiencias y aportes en los usos tópicos. En marzo de 2014 preparé un completo curso Online sobre los Patrones Transpersonales® y las Aplicaciones Locales, que está ayudando a que mucha gente de cualquier parte del mundo pueda formarse en esta disciplina.
De esta forma, llevo 20 años trabajando con las aplicaciones locales de las Flores de Bach. Varios miles de alumnos aplican en diversas partes del mundo las esencias de esta forma, como complemento a los tratamientos florales de fondo.
La llave que abre los usos tópicos de las flores es el Patrón Transpersonal®. que sistematicé simultáneamente a las indicaciones locales.
El Patrón Transpersonal® consiste en una serie de términos que definen la acción de la flor a todo nivel. El de Clematis es, por ejemplo, desconexión. Quiere esto decir que la esencia floral de Clematis sirve para reconectar todo aquello que comparte un determinado patrón de información desarmónico. Da lo mismo que sea un patrón de personalidad (en este caso una persona con rasgos Clematis, ciertamente “desconectada”) o cualquier manifestación de desconexión: desmayo, obnubilación, etc. Pero en aplicación local, Clematis es una excelente esencia para recanalizar energía. Por eso es de uso obligado en debilidad de tejidos o incluso en la muerte de estos (necrosis), ya que se trata de una desconexión del plano físico. En el fondo, todo lo que vaya muriendo, se va desconectando o, si se me permite el neologismo, “clematizando”. De ahí que podamos vincular Clematis a la muerte y, por consiguiente, al calor y a la vida. Así entendemos también el por qué es tan efectiva en personas que tienen manos y pies fríos. Situarse en el Patrón Transpersonal®, es hacerlo más allá de los usos personales (de la personalidad) de la esencia. Implica una mirada amplia y global, desde el patrón de información de la planta, vehiculizado en la esencia floral. Sin duda, esta macroperspectiva facilita un enfoque amplio e integrativo, donde se utilizan las flores desde una concepción elevada y, al mismo tiempo, eminentemente práctica.