Los catalizadores ignorados.
Chestnut Bud
Se trata de una esencia de toma de conciencia imprescindible para todo proceso floral de fondo. Favorece la adopción de una meta-posición, es decir una visión de nosotros mismos desde fuera, lo más objetiva posible. De esta forma, ayuda a resituar contenidos, a integrar experiencias y, en resumen, a trabajarnos interiormente. Sin duda acelera los procesos de indagación personal, de aprendizaje de las lecciones de la vida. También facilita que la información de las demás esencias sea asimilada con más facilidad. En todo caso se trata de una profunda esencia de asimilación e integración de la información.
Heather
Contribuye a disminuir el autocentramiento. En demasiadas ocasiones esto es de gran importancia para favorecer el desarrollo de los procesos relacionados con el autoconocimiento y la empatía.
Por ejemplo, cuando uno está enfadado, es imposible situarse en el lugar del otro, siendo inevitable el autocentramiento. Lo mismo ocurre en infinidad de problemas y situaciones (culpabilidad, traumas, etc.).
Al no estar tan pendientes de nosotros mismos, logramos escuchar mejor a los demás y situarnos en su lugar. Al mismo tiempo, podemos autoexplorarnos con mucha mayor honestidad y objetividad.
Star of Bethlehem
Ayuda a restablecer circuitos energéticos interrumpidos bruscamente por algún trauma. Esta reconexión energética facilita el que puedan actuar a pleno rendimiento las otras esencias. Además, la activación referida puede hacer que se produzcan manifestaciones que estaban bloqueadas hasta el momento. Por otra parte contribuye a que el cliente disminuya sus resistencias, colaborando más con el terapeuta.